Las personas con discapacidad podemos tener pareja y puede tener, o no, discapacidad. Para nosotras, no es algo nuevo, pero parece que no está tan normalizado en la sociedad como pensamos.
Cuando se trata de salir con alguien con discapacidad, el estigma social hace que se hable aún menos de esta situación.
Los mitos de tener pareja con discapacidad
Si tienes pareja y te apetece contarlo en las cenas de navidad venideras, seguro que escuchas alguna de estas frases 🤦♀️
- ¿Eres su cuidadora?»
- «Tu novio también tiene discapacidad, ¿no?»
- «Ah, pero… ¿tienes noviA?»
- «¡Qué buena persona es tu novio! Es un santo.»
Pues esta publicación va dirigida a todas aquellas personas sin discapacidad, para que sean más empáticas y abiertas de mente 🤪
- Podemos tener pareja ¡y puede tener, o no, discapacidad!
- Podemos llevar una vida sexual satisfactoria y plena
- No somos dependientes de nuestras parejas
Sexualidad y discapacidad
Otro mito muy asociado al de la pareja es el de la sexualidad. Las personas sin discapacidad creen que salir con una persona con discapacidad conlleva prescindir de un vida sexual satisfactoria, pero la discapacidad no es impedimento para tener una vida sexual plena.
Por eso, es necesario romper estereotipos sobre la sexualidad de las personas con discapacidad.
El mito de ser dependiente
Un miedo asociado a la discapacidad en pareja es creer que somos totalmente dependientes, pero nada más lejos de la realidad.
Somos independientes gracias a la educación, empleo, accesibilidad y a las ayudas técnicas y asistencia personal.
Abajo lo mitos es una colaboración con el servicio de igualdad del Ayuntamiento de Zaragoza.